A casi dos años de la creación del Parque y Reserva Nacional Kawésqar, diversos actores están trabajando en los planes de manejo, que darán mayor protección a esta área de la Patagonia chilena, con asombrosos valles, lagos, fiordos, glaciares, bosques, y la que es considerada como un refugio de vida para muchas especies, como las ballenas jorobadas y ballenas sei.
Han pasado casi dos años. En enero del 2019 se creó el Parque y Reserva Nacional Kawésqar en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena. Publicada en el Diario Oficial, esta creación tuvo su origen en la consulta indígena a comunidades Kawésqar para la reclasificación de la Reserva Forestal Alacalufes a Parque Nacional, pero además, las comunidades mostraron su interés en proteger efectivamente las aguas interiores (porción marina), de esta manera, la creación de la Reserva se convirtió en la primera reserva 100% marina y bajo tutela de CONAF.
El Parque abarca 2.842.329 hectáreas de ecosistemas vírgenes, a las que se suman las 2.628.429 de hectáreas de la Reserva, es decir, 5.470.758 hectáreas protegidas. Ambas, representan un área compleja y diversa conformada por cerca de 20 mil islas e islotes y 37.950 kilómetros de costa; habitados históricamente por el pueblo Kawésqar.
